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Nueva York, NY – En respuesta a la declaración de la gobernadora Kathy Hochul estado del estado prioridades que anunció hoy, Toni Smith-Thompson, directora de la Oficina del Estado de Nueva York para la Drug Policy Alliance (DPA), emitió la siguiente declaración:
“En medio de nuestra actual crisis de sobredosis, nos complace que la gobernadora Hochul continúe con su compromiso de hacer que el tratamiento, la educación y la prevención del uso de sustancias sean una prioridad. Y nos complace ver que reconoce la necesidad de mantener a las personas fuera de las cárceles y prisiones, ya que el encarcelamiento es un factor de riesgo principal de sobredosis y otros determinantes sociales de la salud. También aplaudimos al Gobernador por poner la tecnología de control de drogas a disposición de los proveedores de servicios, brindando a las personas más conocimiento sobre lo que contienen sus drogas para que puedan tomar decisiones más informadas sobre su consumo.
“Aunque la gobernadora afirma que su administración está adoptando un enfoque práctico para reducir las muertes por sobredosis a través de la reducción de daños, podría estar haciendo más. Una ausencia notable de su plan es la financiación y expansión de los centros de prevención de sobredosis. Si realmente tomara la acción audaz y valiente que dice apoyar, usaría sus poderes para autorizar centros de prevención de sobredosis y proporcionar fondos del fondo de liquidación de opioides del estado para salvar las vidas de miles de neoyorquinos. Los dos OPC en la ciudad de Nueva York han intervenido en casi 700 sobredosis en poco más de un año de funcionamiento y, sin embargo, luchan por permanecer abiertos sin financiación del gobierno. En cambio, el Gobernador está dando un paso atrás y prometiendo apoyo para más respuestas fallidas a la guerra contra las drogas que solo han hecho que nuestro suministro de drogas sea más peligroso. Las nuevas prohibiciones y sanciones penales socavarán los esfuerzos para mantener a las personas fuera de las cárceles y prisiones, lo que indudablemente resultará en la criminalización de las mismas personas que necesitan apoyo y no harán nada para aumentar el acceso a herramientas e intervenciones que salvan vidas.
“Como el único estado con dos centros de prevención de sobredosis, Nueva York puede seguir liderando y siendo un modelo para otros estados. Esperamos trabajar con el Gobernador y la Legislatura para autorizar y financiar centros de prevención de sobredosis e invertir en soluciones de salud pública adicionales”.